Meditantes es uno de los espacios que abarca la exposición, en total fueron 4 partes donde Duque mostraba sus facetas como artista, diseñador gráfico y publicista utilizando su herramienta indispensable: la fotografía, y su manera de capturar y recrear la realidad, unas veces tan impactantes en cuestiones reflexivas y otras más abstractas que invitan a pensar en diferentes niveles. Una exposición que va desde lo evidente e invisible a la apreciación de lo que existe y es tan cercano pero desconocido
El espacio meditantes fue un gran conjunto de fotografías de personalidades de nuestro país, sujetos relevantes en nuestra cultura que por sus acciones en la política, la televisión, el arte.. han llegado a ser icónicos y son reconocibles para todos; pero no vistos desde la perspectiva cotidiana sino con una variante muy importante, la omisión de la mirada, cada personaje tenía los ojos cerrados y tendía a desvanecerse en el fondo. Esta característica evoca la muerte y la natural inclinación a desaparecer. Además de esto, las imágenes eran en blanco y negro lo que sugiere un grado de realismo algo aislado y un especial protagonismo en los contrastes y claro-obscuros. Cada fotografía contenía una expresión que me transportaba al trance de la muerte y que llenaba de significados toda la composición, fue muy interesante ver e identificar estas figuras en la etapa de la vida más tabú que conocemos. Había mucha tranquilidad y detrás de las exteriorizaciones un montón de historias contadas y otras sin contar que se volvían un reto descubrir, pero que sin embargo eran transmisibles con el peso de la piel, de las líneas, de los gestos y de las formas que condensaban el rostro y que podían mostrar la fibra humana. Pude sentir que la mirada es un factor de contacto increíble, pero que cuando no está, el protagonismo lo toma cada sentimiento que se hace visible en la piel
SHOPPING PLANET
“Detrás de la pantalla del
televisor, de los medios electrónicos o de las páginas de una revista, se
oculta el rostro de ese otro mundo que no figura en los mapas estratégicos de
las marcas. Millones de familias pobres
están expuestas a los gases alucinógenos del deseo consumista de la felicidad
falsa, que brinda el accesorio inútil.”
La anterior frase que Duque
redacto en su exposición es realmente diciente de su trabajo pensando en la
reflexión sobre el consumismo “Es la publicidad pensándose a si misma”. Cada
imagen contrasta dos realidades alejadas dando una composición muy cruda y
clara de mundos opuestos, muestra la indiferencia del mercadeo, la industria y la publicidad y su función
meramente enfocada al consumismo y a un grupo de personas con poder
adquisitivo, promoviendo la inequidad social y fortaleciendo la sociedad de
consumo.
Cada imagen me llevo a
reflexionar sobre esa realidad invisible en la que no pensamos porque no nos
toca y en la indiferencia general que se tiene al respecto; Estamos pensando de
una manera egoísta porque jamás nos detenemos a mirar y a actuar sobre estos
temas que bien es cierto son inocultables en nuestro país pero que se vuelven
irrelevantes para todos. Han evolucionado las comunicaciones, la ciencia, la
tecnología, la educación, pero siempre esta demás la realidad del tercer mundo,
el fenómeno de nunca tener en cuenta esta problemática es directamente un
egoísmo latente. Estas imágenes nos muestran que es importante y existe la
pobreza y que debería ser un asunto de todos.
REALIDAD MÍNIMA
Es una compilación de fotografías
dispuestas a partir de la inmediatez que nos da la tecnología, son imágenes que
se conciben partiendo de la observación que
Duque hace de la cotidianidad de
su vida, es enfocar cada parte que construye un momento, es hacer relevantes
los segundos. Esta exposición habla de la evolución de la comunicación visual y
de la facilidad contemporánea para crear imagen “Del mundo fugaz de la
generación digital que descubre una nueva dimensión en la pequeña realidad”.
Eran bastantes fotografías donde cada una estaba encapsulada en una caratula de
cd dando a entender lo masivo de la actualidad y una sensación casi musical que
se construye mediante imágenes realizadas al instante como las notas
consecutivas que conciben una canción.
ESTRUCTURAS EFÍMERAS
Es una serie de imágenes donde el
humo protagoniza las formas y el tiempo de exposición acopla los recorridos en
diferentes intensidades que construyen unas “catedrales” para meditar.
Duque pensó en esta producción de
imágenes con la intención de hacer visible el aire y sus recorridos en la atmósfera y utilizo el humo para dibujar estos caminos del viento, también
duplico el resultado para crear arquitecturas simétricas y formas relacionadas.
Me pareció fascinante observar
cada línea con sus diferentes intensidades y palpar visualmente una composición
que sentí hermosa porque contenía lo sutil y delicado de las formas que cobraban fuerza con su repetición en
espejo. Y además el poder ver lo invisible y dimensionarlo a una expresión
destacada.
En conclusión esta fue una exposición
para pensar, de allí su nombre meditantes, no solo por la primera parte de
dicha muestra sino porque cada imagen invitaba a la reflexión. Fue muy grato
entender las imágenes desde su propósito y origen. Personalmente considero que
visitar esta exposición fue un ejercicio de análisis y meditación donde el
contraste (de escenarios, de realidades, de pensamientos, de invisible-visible,
de épocas) jugo un papel determinante.